Clarín: Testimonio trágico

La obra de Griselda Gambaro, dirigida por Cristina Banegas, y el horror como posible lenguaje del arte.

...La obra tiene las virtudes y las dificultades de un texto en el que no hay lugar para la emoción fácil. Todo está al servicio de un testimonio trágico cuya belleza alumbra la esperanza de que todavía siga teniendo sentido trasladar la vida al lenguaje del arte. Por terrible que sea —es la propuesta de la autora—, si el horror puede transmutarse en ficción sigue pareciendo posible que la criatura humana acepte mirarse y reconocer al monstruo en que arriesga convertirse. Antes de que se rompan todos los espejos. Para leer la crítica completa, visitar http://www.clarin.com/diario/2007/06/26/espectaculos/c-00501.htm